No quiere decir esto que en ocasiones no sea necesario que existan este tipo de empresas, pero cuando se abusa de su tamaño, o de su control en el mercado los resultados son casi siempre negativos.
Una empresa pública es aquella en la que el Estado tiene la propiedad total o mayoritaria de la misma, y debería tener una función para satisfacer necesidades de la población de una forma beneficiosa para los ciudadanos.
Existe también dentro de este rubro las empresas paraestatales, que siendo también del Estado tienen una mayor independencia administrativa para poder enfocarse en cumplir mejor sus objetivos.
En la práctica, en muchos casos en el mundo, y en especial en México, este tipo de empresas son manejados muchas veces desde el punto de vista político, y también para beneficio de la clase política, y en pocas ocasiones como prebendas o premios para quienes sean fieles al gobierno en turno.
Sin embargo constantemente se vende la idea de que las empresas públicas son para beneficio del pueblo, pero no son pocas las veces que terminan siendo monopolios muy mal administrados, que pierde dinero, sin dar beneficios reales a la población, pues ni son las mejores en sus productos y servicios, y en muchas ocasiones tampoco son los más económicos, ya que eliminan a la competencia, y hacen que los ciudadanos tengan que depender de ellas y no tenga ninguna otra alternativa para comprar esos productos o servicios.
No quiere decir esto que en ocasiones no sea necesario que existan este tipo de empresas, pero cuando se abusa de su tamaño, o de su control en el mercado los resultados son casi siempre negativos.
Hoy estamos viviendo una situación en México en la que se pretende hacer creer que las empresas públicas son del pueblo y para el pueblo, y con ese pretexto se agrede el concepto de la empresa privada, que desde luego no es que sea perfecta, y que no requiera ser regulada para cumplir también con un objetivo social, pero entre más crece la inversión privada, y sobre todo más ciudadanos tienen la posibilidad de ser empresarios, ya sea pequeños medianos o grandes, crece definitivamente la posibilidad de tener mejores productos y servicios, y un mejor nivel de vida, con mayores empleos, y al mismo tiempo con el incentivo de desarrollar no solamente cuestiones económicas, sino creativas en todos los sentidos: técnicos, científicos, artísticos, y también de desarrollo humano.
Por eso es muy preocupante la tendencia del gobierno actual de pretender volver a controlar en su totalidad servicios tan básicos como son las energías.
Es importante que la población esté consciente, de que requerimos de la mayor inversión privada posible, para desarrollar a este país, y para que la población tenga mayores oportunidades de crecimiento y mejor nivel de vida, y no estar dependiendo de los caprichos de los políticos, que normalmente utilizan estas empresas para otros fines que no son los que realmente deben tener.
La sociedad debe trabajar más unida, para mantener su independencia y no pensar que debe estar siempre sujeta a los caprichos del Estado para tener un buen nivel de vida, no solamente refiriéndome a lo económico, sino a todo lo que compone el ser humano, es decir, a su desarrollo cultural espiritual y físico, por lo que debemos trabajar unidos e impedir ir por caminos de un estatismo socialista que pretenda controlar la economía, como mejor medio para después controlar a la ciudadanía.
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