¿Has querido conversar con tu pareja algo que te molesta, preocupa o algo que tienen que decidir juntos y no sabes cómo decírselo sin que termine siendo una discusión? La sana comunicación en pareja es muy importante, sin embargo, no todos sabemos cómo hacer que ésta sea efectiva y asertiva.
Para que una comunicación tenga estas características tiene que ir mucho más allá de decir algo a otra persona pues implica expresar sentimientos, ideas u opiniones de manera clara, honesta y respetuosa para que de esta manera sea más probable que la otra persona decida escuchar y esforzarse por comprender. Este es por tanto el objetivo de la comunicación asertiva y esto permitirá que surja un verdadero diálogo en la pareja y la posibilidad de llegar a acuerdos y resolver problemas.
Aquí te dejamos una checklist que te ayudará a comunicarte de una manera asertiva, especialmente cuando hay algún tema delicado qué tratar en la pareja.
Checklist de una comunicación asertiva:
- Identifica qué es aquello que quieres transmitir a tu pareja: ¿cuáles son tus necesidades?
- Sé claro y honesto: evitando las indirectas, el sarcasmo o las suposiciones. Evita mencionar palabras absolutas como “siempre”, “nunca” o “jamás”.
Por ejemplo: Imagínate que desde hace varias semanas tocaba visitar a tus papás, pero no han podido hacerlo porque tu pareja ha estado llegando más tarde de lo usual a casa después de trabajar.
Comunicación NO asertiva
“¿Oye como que tú ya no llegas temprano? Hace cuánto que he querido que visitemos a mis papás, ya nunca me haces caso, a ti nada más no te importa…”.
Comunicación asertiva
Me encantaría un día de estos que podamos visitar a mis papás, ¿qué día se te acomoda más con el trabajo para poder ir a comer con ellos?”
- Resalta lo positivo antes que lo negativo: antes de expresar alguna inquietud o diferencia recuerda la regla del 3×1 (resaltar tres cosas positivas antes que la oportunidad de mejora).
- Busca el momento oportuno: Busquen un lugar tranquilo y exclusivo para ustedes como su cuarto o consideren incluso ir a caminar o tomar un café.
- Escucha activamente: presta atención cuando tu pareja te habla. Respeta su turno de palabra y no te adelantes a pensar en qué responder mientras escuchas.
- Negocia: El problema no son las parejas que discuten, sino las parejas que no resuelven. Busquemos soluciones, no solo “ganar” la discusión.
Comunicar eficazmente lo que sentimos permitirá poner límites o mostrar las preferencias de cada uno, nos permitirá rechazar o hacer peticiones, expresar amor, empatía y afecto y dialogar en un ambiente de paz y confianza temas de gran importancia como la crianza, la intimidad, los roles y las finanzas. De esta forma podremos resolver conflictos y evitar que surjan problemas, que por no haberlos dialogado antes, vayan afectando nuestra relación a largo plazo.
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