En Coparmex, los empresarios sí hemos optado por construir el México del futuro, un México en el que todos estemos representados, en el que no se excluya a nadie.
El pasado martes 16 de marzo desde Coparmex lanzamos una campaña de difusión en el contexto preparativo previo a las elecciones del próximo 6 de junio. El llamado, que no es en la primera elección que lo hacemos, implica una declaración que, leída en primera persona, es un compromiso personal como ciudadanos: participo, voto y exijo.
Estamos convencidos de que además de ser el proceso electoral más “grande y complejo de la historia”, como lo han señalado las autoridades del INE, también históricamente representa un muy importante mensaje del México que queremos construir desde la sociedad hacia el futuro.
Aunque hay un ambiente altamente polarizado, propio de un proceso electoral, también tenemos algunos eventos inéditos en nuestra joven democracia como el hecho de que hoy tenemos a un jefe del Ejecutivo que decidió NO ser un factor de unidad sino de polarización, y desafortunadamente tampoco ha dejado de ser un contendiente electoral. Aunado a esto la realidad de una pandemia que paralizó al mundo, la cual nos tiene a la mayoría de los ciudadanos agazapados y con miedos que antes no teníamos.
Por otra parte, en México aparentemente nos debatimos entre dos ideas o proyectos, en una dialéctica desgastante que sin duda también es producto del contexto histórico sociopolítico y del mundo de las ideas, y muy frecuentemente de las ideologías. Aun así, los empresarios en Coparmex nos reusamos a colocarnos en una posición polarizante, que se podría expresar con dos palabras: corrupción o regresión.
En Coparmex, los empresarios sí hemos optado por construir el México del futuro, un México en el que todos estemos representados, en el que no se excluya a nadie; un país en el que todos nos tendamos la mano para alcanzar las metas más altas y superar los retos más complejos.
Para lograr ese sueño, necesitamos consensos y acuerdos. Para alcanzarlos es imperante el diálogo, es también fundamental dejar a un lado el clima de crispación y de polarización social tan típico de las redes sociales.
La verdad es que no nos gusta el camino que está siguiendo nuestro país, sobre todo porque hemos perdido esos espacios de diálogo en donde todos podíamos, de entrada, respetarnos y exponer de forma racional e inteligente los argumentos, pero también donde escuchábamos sobre la realidad y dolor de las y los afectados y juntos, siempre juntos, podíamos resolverlos.
En este contexto es que nos enfrentamos con una elección crucial para el país, este 6 de junio debemos sembrar la posibilidad para acordar y por lo pronto esa posibilidad la podemos lograr a través del voto, un voto inteligente que tenga como visión construir un México de nuestros sueños; un voto por la pluralidad democrática que obligue a todos los actores sociales y políticos a dialogar. Las palabras mágicas para este voto inteligente son: equilibrio y pluralidad. No queremos un país donde prevalezca el pensamiento único, sino donde prevalezca la UNIDAD en la DIVERSIDAD. Por eso #ParticipoVotoExijo #OpiniónCoparmex.
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