Derrota de AMLO

¿Puede perder López Obrador?

¿Puede perder López obrador por tercera ocasión?



Después del segundo debate y ante la recta final del proceso electoral a menos de 40 días de la elección, analistas y comentaristas se preguntan si López obrador puede ser derrotado.

En el segundo debate, José Antonio Meade pudo presentar una mejor cara, dado su conocimiento y experiencia sobre los distintos temas, pero aún así no alcanzó a entusiasmar al auditorio, aunque mejoró y se le reconoce su experiencia y capacidad.

Anaya mantuvo su elocuencia y habilidad para el debate y la retórica, sin embargo aunque resultó ganador por un menor margen que en el primer debate, según la mayoría de las opiniones en los medios, no acaba de conectar con suficiente liderazgo político a juicio de muchos.

López obrador, aunque se vio repetitivo, lento y con dificultad para coordinar respuestas y planteamientos, reafirmó su posición de sentirse el líder en la carrera y su mensaje de ser un “líder moral”, en contra de “la mafia del poder”.

Si se hace un recuento de las principales encuestadoras: Massive Caller, Mitofsky, el Financiero, Gea ISA, BGC, Reforma, Parametria, Suazo/Heraldo y 24 horas y se promedian los resultados en sus muestreos de Mayo, encontraremos que López obrador se posiciona con el 40% de los votos contra 28% de Anaya y 18% de Meade por 5 % de Margarita, ya fuera de la contienda y 3% del Bronco.

Parece ser una ventaja importante, sin embargo se ha cuestionado mucho la validez y el alcance de las muestras de las encuestas, tanto por el escaso número de los encuestados, y por su distribución geográfica así como por los resultados totalmente desafortunados de todas las encuestas en la elección presidencial del 2012, con respecto de los resultados finales que dieron un estrecho margen en favor de de Peña Nieto, contra la “amplia ventaja” sobre los 20 puntos que presumía.

Hacia la recta final de las campañas, se presentan como se dijo en el debate, dos alternativas en pugna, por un lado la propuesta populista, enraizada en la indignación contra la corrupción y que se presenta a sí misma como el monopolio de la verdad y de la ética, aún cuando en su equipo ya anunciado, recoge figuras contaminadas por el cáncer de la corrupción y liderazgos descartados por otros partidos que desconciertan a sus propios seguidores pues resultan con ideas contradictorias y antagónicas.

Pero Andrés Manuel no parece preocuparse por esas contradicciones y por la exhibición pública de la corrupción de colaboradores cercanos, y mantiene su discurso monotemático contra la mafia del poder y la corrupción, sin poner sobre la mesa propuestas de solución a los grandes problemas nacionales, incluida la inseguridad y la violencia, que se agrava en los últimos días en el país.

Frente a la opción populista se presenta, la oferta de la continuidad, con rostro “ciudadano” que por ello no ha logrado crecer, pues carga una losa que no le permite avanzar, la marca del “nuevo PRI” que resultó más contaminado y corrupto y del que su candidato no ha querido desligarse.

Pero aún se mueve la otra opción, liberal democrática que encabeza Anaya y que ante la caída de Meade y la salida de Margarita de la contienda, más la trivialización de la política que representa El Bronco, se ve como la esperanza para millones de mexicanos que no desean ver al peje en la presidencia.

En los últimos días han sido varios los empresarios mexicanos que han hecho pública su preocupación ante sus trabajadores, de una perspectiva de dificultades para sus empresas y la necesidad de prever medidas de austeridad y de cuidados de sus propios empleados y de la empresa, ante la crisis que podría enfrentar México de llegar a un gobierno populista.

¿Cuál será el resultado de la elección? ¿Puede aún perder López obrador por tercera ocasión? eso dependerá de los mexicanos que salgan a votar, -se estima una participación del 62%, y también en forma definitiva del llamado voto útil que se promueve todos los días con intensidad por quienes no quieren ver el populismo en el próximo gobierno de México.

La ciudadanía tiene la palabra, veremos mucho todavía en las campañas pero ya falta poco.

 

@yoinfluyo

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