¡Misión Cumplida! Puede decir la agencia antidrogas de Estados Unidos, conocida como la DEA, con la llegada de Caro Quintero a su territorio, después de 40 años del asesinato y tortura del agente Enrique “kiki” Camarena, en manos de los narcotraficantes que dominaban la escena en los años ochenta en México.
Y para hacer un homenaje a “Kiki” Camarena, la DEA ha puesto como portada de su página web (https://www.dea.gov/) la foto del exagente y el hashtag: #JUSTICEFORKIKI . Además, en su cuenta de X escribieron: “Después de 40 años, Rafael Caro Quintero se encuentra en Estados Unidos para enfrentar la justicia por el asesinato del agente especial de la DEA Enrique “Kiki” Camarena. Nos vestimos de rojo para reconocer el sacrificio de Kiki y honrar su vida. #RedForKiki #NeverForget”.
En el sitio web de la DEA también aparece un mensaje en Video de Derek Maltz, el actual administrador de esa Agencia, donde presenta a Camarena como un héroe, mientras aparecen imágenes del que fue esposo, padre y policía.
La semana del listón rojo.
Como todas las narraciones que conmemoran a los héroes, las sociedades crean calles, monumentos o símbolos para no olvidar el bien que hicieron. Muchos desconocen que, a raíz de la muerte de Kiki, todos los años, del 23 al 31 de octubre, en Estados Unidos se realiza “La semana del Listón Rojo” en todo el país. Durante esa semana, la gente de comunidades y organizaciones de la sociedad se comprometen a vivir sin drogas, usan un listón rojo y participan en eventos antidrogas de alcance comunitario.
La narrativa es muy importante para elevar la cultura, el orgullo nacional y fortalecer las buenas causas. El recurso no es nuevo, los griegos contaban las leyendas de sus héroes, ciertos o imaginarios, para cultivar en sus jóvenes la grandeza del espíritu, como superar las adversidades y alcanzar nuevas metas, y la fuerza para sortear los obstáculos o confrontaciones de los enemigos.
La comunicación de los auténticos líderes políticos suele ser dicotómica, plantea una causa justa, contra un adversario que provoca el mal. En síntesis, intenta narrar la lucha del bien contra el mal, por eso más que ideas, el liderazgo político trata de que las comunidades humanas, asuman posiciones frente a las realidades, obstáculos o adversidades que viven los ciudadanos cada día.
En la lucha contra el crimen, también México tiene héroes, por supuesto. Y justamente una nota que pasó desapercibida para varios medios de comunicación es la información que apareció en la columna de El Universal el sábado primero de marzo, donde se da a conocer que: “El gobierno de Estados Unidos solicitó al gabinete de seguridad que el capo Rafael Caro Quintero fuera entregado a la agencia antidrogas, la DEA, por la Marina mexicana, dependencia que en la recaptura del llamado “narco de narcos” perdió a 14 elementos de sus fuerzas especiales”. Y esta solicitud, es en reconocimiento a los jóvenes marinos mexicanos que perdieron la vida durante la recaptura de este narco.
No olvidemos que Kiki Camarena nació en México, en Mexicali, Baja California. Ahora una biblioteca pública, una escuela y una calle de Calexico llevan su nombre. También hay una escuela secundaria, la Enrique Camarena Junior High School, y una escuela primaria, Enrique Camarena Elementary School .
No cabe duda de que, en medio de las luchas políticas y la polarización que vivimos en la conversación pública, no alcanzamos a dimensionar la importancia de fortalecer la narrativa de nuestras propias luchas, las batallas por combatir a aquellos que hacen un mal enorme a la comunidad a través de extorsiones, violencia, robo y demás negocios criminales. Lo que es peor, las narcoseries hacen lo contrario.
Narrar la historia de los héroes que trabajan por la defensa de las personas y las comunidades, reconocer a los mexicanos que ponen en riesgo su vida en la lucha contra los criminales, es un elemento crucial para mantener viva la esperanza de una nación e inspirar a sus ciudadanos. Es decir, es trascendente narrar también las victorias. Lo decía muy bien Chesterton:
“Los cuentos de hadas superan la realidad no porque nos digan que los dragones existen, sino porque nos dicen que pueden ser vencidos”.
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