Sociedad enferma
Con más frecuencia, los seres humanos tomamos con ligereza e insensibilidad la violencia que se vive en el mundo.
Con más frecuencia, los seres humanos tomamos con ligereza e insensibilidad la violencia que se vive en el mundo.
Estar de acuerdo en que se castigue a quienes atacan a las mujeres no es estar en contra de que se sancione a quienes pintaron los monumentos.
Así las cosas: para el presidente, todos los triunfos que benefician a México o a los mexicanos son gracias a su gobierno y todo lo malo es culpa de los gobiernos pasados.
A ningún presidente le toca hablar para ganar seguidores, la tarea para la que se postularon es gobernar, haciendo lo posible por mantener unido a su país.
Con el avance de la tecnología y la difusión del conocimiento científico se han perdido valores que hacían que los humanos se preocuparan por el otro.
La postura que expresó el rector de la Universidad Iberoamericana es clasista y anticristiana; sin embargo, en lo que acierta es que depende de todos el rumbo de México.
La reflexión es el primer paso para no repetir errores, para entender lo que sucede, y es también de lo que carece el ser humano, hoy en día.
Tal parece que nadie sabe qué es lo que quiere el presidente de México (ni siquiera su gabinete); no se ve claro el rumbo del país.
Ciudadanos y el presidente tienen los mismos datos, se mantienen los niveles de violencia de la pasada administración, no hay avances y la crisis con la Policía Federal agudiza el problema.