Los proyectos de desarrollo a gran escala como las obras insignias del gobierno federal, han estado acompañados de corrupción y controversias relacionadas con los derechos.
México sufre graves deficiencias en el estado de derecho que limitan el pleno disfrute ciudadano de los derechos políticos y las libertades civiles. La violencia perpetrada por la delincuencia organizada, la corrupción entre funcionarios gubernamentales, los abusos de los derechos humanos por parte de actores estatales y no estatales y la impunidad desenfrenada se encuentran entre los muchos desafíos de gobernabilidad más visibles en el país, destaca el reporte “Libertad en el mundo 2020”, elaborado por la organización Freedom House.
En su informe anual Libertad en el Mundo, Freedom House hace un análisis sobre el acceso de las personas a los derechos políticos y libertades civiles en 210 países y territorios, se afirma que 2019 fue el decimocuarto año consecutivo de disminución de la libertad global, y que ciudadanos de 64 naciones experimentaron un deterioro de sus derechos políticos y libertades civiles, mientras que sólo los habitantes de 37 experimentaron mejoras.
El organismo observa el desarrollo de los derechos políticos que agrupa en tres categorías: proceso electoral, pluralismo político y participación y funcionamiento del gobierno; así como de libertades civiles que engloba en cuatro categorías: libertad de expresión y creencia, derechos de asociación y organización, Estado de derecho y autonomía personal y derechos individuales. Según la calificación que cada uno obtenga en de ambos
De acuerdo al resultado de la suma del puntaje obtenido entre los derechos políticos y las libertades civiles Freedom House considera la condición de cada país como libre, parcialmente libre o no libre.
En el más reciente estudio determinó que el 43 por ciento de la población mundial era libre, en tanto que 32 por ciento estaban en el rango de parcialmente libre y el 25 por ciento restante viven sin libertad.
En el caso concreto de México el informe lo ubica como un país “parcialmente libre”.
El reporte da cuenta de los principales acontecimientos políticos y sociales sucedidos en México el año pasado conforme a los cuales observa el grado de libertad con que los ciudadanos se manifiestas, el respeto o no a sus derechos por parte del gobierno, así como las decisiones que desde la cúpula del poder se toman lo que define el ambiente de libertad que se vive en el país.
Destaca que México sufre graves deficiencias en el estado de derecho que limitan el pleno disfrute ciudadano de los derechos políticos y las libertades civiles.
Entre las observaciones que se señalan en el análisis se indica que “los mexicanos están sujetos a la amenaza de violencia a manos de varios actores, incluidos delincuentes individuales, cárteles de la droga que operan con impunidad y agentes de policía que a menudo son susceptibles al soborno.
“Los mexicanos son particularmente vulnerables a las desapariciones forzadas, lo que sigue siendo un gran desafío para el gobierno a pesar de los esfuerzos realizados para abordar la acumulación de personas desaparecidas en los últimos años. Además, los mexicanos bajo custodia policial corren el riesgo de ser torturados por las autoridades y también deben navegar por un sistema penitenciario donde el debido proceso y la seguridad física son escasos”.
Asimismo, indica que “los derechos de propiedad en México están protegidos por un marco legal moderno, pero la debilidad del sistema judicial, la solicitud frecuente de sobornos por parte de burócratas y funcionarios y la alta incidencia de extorsión criminal dañan la seguridad de la propiedad para muchas personas y empresas.
“Los proyectos de desarrollo a gran escala han estado acompañados de corrupción y controversias relacionadas con los derechos en los últimos años, ejemplificado en 2019 por disputas sobre iniciativas de alta prioridad de López Obrador para desarrollar un nuevo aeropuerto en una base militar al norte de la Ciudad de México y una línea de tren que atienden principalmente a turistas en la Península de Yucatán”.
Democracia y pluralismo mundial
Gran parte de los países en el orbe no está mejor que nuestro país, según los observado por Freedom House que asegura que la democracia y el pluralismo están bajo ataque.
Según los acontecimientos que se han presentado a lo largo y ancho del mundo el organismo asegura que los dictadores se esfuerzan por acabar con los últimos vestigios de la disidencia en su país y buscan extender su influencia dañina a nuevos rincones del mundo.
Al mismo tiempo, subraya, “muchos líderes elegidos libremente están reduciendo drásticamente sus preocupaciones a una interpretación ciega del interés nacional. De hecho, estos líderes —incluidos los directores ejecutivos de Estados Unidos e India, las dos democracias más grandes del mundo— están cada vez más dispuestos a romper las salvaguardias institucionales y despreciar los derechos de los críticos y las minorías en su persecución de sus agendas populistas”.
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