Lo complejo del caso es que, a pesar de la evidencia de no tener ninguna enfermedad, el pensamiento le impedirá gozar de su salud recobrada.
Se suele llamar así a aquellas personas aquejadas de un pánico irracional a enfermar. Es una actitud que puede derivar en trastorno, el centrar la atención continuamente en los diferentes síntomas que todo cuerpo humano percibe sobre su propio funcionamiento.
La hipocondría es, en esencia, una actitud que el individuo adopta ante la enfermedad. La persona se somete, constantemente, a un autoanálisis minucioso y preocupado, incluso obsesivo, de las funciones fisiológicas básicas, y piensa en ellas como una fuente de segura enfermedad biológica.
Capta los latidos del corazón, ruido intestinal, movimientos reflejos, sudoración, calor, frío, tensión, protuberancias y un largo etcétera. Percibe síntomas que interpreta como el desarrollo de una patología grave, que seguramente le llevará a la tumba. Son enfermos imaginarios.
Ocuparse de la salud es hoy en día casi una obligación, para los hipocondríacos es una obsesión. Pasan de la ocupación a la preocupación, porque están todo el día pendiente de ese síntoma y lo que les puede ocurrir. Suelen ser personas ansiosas, temerosas, retraídas. Incluso llegan a sentir realmente los síntomas de la enfermedad.
¿Quieres sabes cuales son las señales de que eres una persona hipocondríaca?
– Tienes un miedo desmedido al dolor o la muerte.
– Un pequeño síntoma te hace pensar lo peor.
– Has pensado que padecías una enfermedad mortal muchas veces en tu vida.
– Visitas mucho al médico.
– El médico se equivoca y tú NO.
– Te haces autoexploraciones a la menor ocasión.
– Tu familia y amigos ya no te creen cuando les dices que estás enfermo.
– Puedes creer que tienen cualquier enfermedad menos la hipocondría.
Cuando la persona se enfrenta a un síntoma, piensa en algo grave, acude al médico para que le confirme su autodiagnóstico. El doctor le dice: son solo nervios, lo cual le reduce su ansiedad.
Lo complejo del caso es que, a pesar de la evidencia de no tener ninguna enfermedad, el pensamiento le impedirá gozar de su salud recobrada. Tardará poco en volver a pensar que el médico está equivocado, que realmente si está enferma, y empezará de nuevo es círculo.
Como dejar a un lado esta actitud, o ayudar a alguien que la tiene:
– Dejar de hablar de las enfermedades.
– Dejar de buscar en Internet un diagnóstico de los síntomas, deja este trabajo a los médicos y especialistas.
– Contar cuantas veces se ha asistido al médico o realizado análisis en el último año.
– Al ser un trastorno mental, aprender a controlar la mente, los pensamientos y emociones negativas o depresivas.
– Aprender a ser más positivo.
– Buscar ayuda psicológica.
– Dejar de tenerle miedo a la enfermedad y aceptar cuando las enfermedades son leves o graves.
Date cuenta que el estar hablando constantemente de sus enfermedades y síntomas aleja a tus seres queridos y amigos. Si eres una persona hipocondríaca, acéptalo, haz un intento por seguir estos consejos, y si no lo logras, solo pide ayuda de inmediato y aprende a vivir saludablemente.
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