Con educación México podría convertirse en uno de los países más ricos del mundo.
Este 23 de mayo se celebra el Día del estudiante, una fecha que tiene como finalidad el conmemorar el movimiento estudiantil de 1929, año en que los estudiantes de la UNAM se manifestaron a favor de la libertad de cátedra y la autonomía universitaria.
El día del estudiante nos hace cuestionarnos sobre la educación en México: ¿cómo vamos?, ¿para qué sirve la educación? Y ¿qué acciones se emprenden para mejorarla?
La educación en México
La educación es el eje principal de cualquier país y debería ser la política pública más importante por parte de todos los gobiernos en el mundo.
En nuestro país según el ahora desaparecido Instituto Nacional para la Evaluación Educativa (INEE) en su cuarto informe de 2018, reveló datos interesantes de crecimiento en este sector.
Según este informe, el acceso que la población tiene a la educación primaria en niños de edades entre 6 y 11 años de edad es del 97.7%, los jóvenes de 12 a 14 años y cursar el nivel secundaría se encuentra en una cobertura del 93.3%.
Sin embargo, los focos rojos se encuentran en la cobertura a nivel preescolar y media superior; pues de los niños que tienen entre 3 y 5 años de edad tan sólo el 77.7% asiste a la escuela, a pesar de que desde hace una década se decretó la obligatoriedad de la educación prescolar. Mientras que, los jóvenes que deberían cursar la educación media superior después de terminada la secundaria, sólo el 73.2% ingresan.
A pesar de que el país se encuentra muy cerca de alcanzar la cobertura universal en el nivel primaria, el estudio revela que es el sector que menos incremento porcentual tiene. En cambio los jóvenes de entre 12 y 14 años de edad que deben cursar la secundaria, aumentó 15 puntos en comparación con 1990, año en el que se inició a realizar el censo comparativo.
Por otro lado, el avance en la educación media superior ha sido evidente, a pesar de estar al final de los porcentajes calificados, el avance fue de casi 24 puntos porcentuales de 1990 a 2015.
Según estos datos, en 1990 sólo el 49.6% de jóvenes tenían acceso a la educación media superior, actualmente el 73.2% están cursando este nivel educativo.
Por otro lado, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), indicó en su informe de 2018 que las personas entre 25 y 34 años de edad en nuestro país no tienen la educación secundaria, colocando a México como el cuarto lugar más alto de adultos sin estudios.
Además la OCDE menciono que los profesores mexicanos, tienen un promedio de 25 alumnos por educador, mientras que la media mundial es de 14 estudiantes por profesor.
En 2015 México gastó el 17% de su presupuesto en educación, un promedio de 4 mil dólares por estudiante, mientras que la media utilizada por la organización para el comparativo de gastos por naciones, es de 10,522 dólares por alumno, tomando en cuenta que en países como Luxemburgo llega a gastar hasta 22 mil dólares por estudiante.
Actualmente el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha propuesto un aumento de 2.8% al presupuesto de educación, dándole a este rubro 300 140.2 millones de pesos, además de emprender programas de becas universales y apoyos educativos.
La educación ayuda a formar la autonomía y mayor responsabilidad en las personas.
Las escuelas son el lugar idóneo para combatir la desinformación, abrir las fronteras del pensamiento y la adquirir capacidad de ser autocrítico y consciente, pare evitar la manipulación de distintos sectores.
La educación también ayuda a no volver a cometer errores del pasado, saber enfrentar los conflictos del presente y disfrutar con libertad de conciencia lo obtenido. La educación es el eje fundamental para el desarrollo de una nación, por ejemplo:
El primer indicador educativo a nivel mundial lo tiene Singapur, un país asiático que se independizó del Reino Unido en 1963 y que actualmente es uno de los países más ricos del mundo.
El secreto para que Singapur se convirtiera rápidamente en uno de los países más ricos del mundo fue la educación y por lo que es evidente que el reforzamiento su modelo educativo dio el resultado esperado.
La nación asiática en 2016 apareció con la mejor calificación por el Foro Económico Mundial, que le dio una puntuación de 6.3 en un rango del 1 al 7, gracias al sistema educativo vigente, donde más de la mitad de su población tiene estudios universitarios, mientras que México obtuvo una calificación de 3.5, ubicándolo en la posición 102 de 137 países.
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