Sin duda, una de las épocas más oscuras de la historia ocurrió durante la Segunda Guerra Mundial, pues miles de hombres se masacraron en campos de batalla y otros tantos junto a mujeres, adultos mayores, embarazadas, jóvenes y niños fueron asesinados en los campos de concentración, entre ellos, el más mortífero: Auschwitz.
Desde 1939 hasta 1945, la muerte y barbarie invadieron al mundo, afectando en su mayoría a Europa, territorio en el que los Nazis, liderados por Adolf Hitler, en busca de preservar la raza aria, asesinaron, torturaron, explotaron y experimentaron con miles de judíos, gitanos, presos políticos, prisioneros de guerra, homosexuales, entre otros.
De acuerdo con el Museo del Holocausto de Estados Unidos, en 1933, la población de judíos en Europa era de nueve millones, y se estima que durante el holocausto murieron seis millones de personas, lo que indica que en la SGM, Adolf Hitler asesinó a dos terceras partes del total de judíos que había en el viejo continente.
Auschwitz, el campo de concentración más mortífero
Fue el 27 de enero de 1945, hace 79 años, cuando la división de infantería del Ejército Rojo encontró el campo de concentración y exterminio Auschwitz, que en la puerta principal tenía la frase Arbeit Macht Frei, el trabajo los hará libres; sin embargo, al interior descubrieron el infierno y fueron testigos de la muerte en vida.
El ejército ruso encontró y liberó a los sobrevivientes del campo de concentración, pues al perder la guerra, los alemanes trataron de hacer todo por esconder los rastros de sus crímenes inhumanos y hasta trataron de acabar con todos los cautivos, pero la destrucción de documentos y evidencia pesó más, para luego escapar del lugar.
La construcción de Auschwitz inició el 04 de mayo de 1940 y en 1941 se hizo la primera prueba de la cámara de gas. En este sitio, se robaba a los judíos, vivir o acabar con la vida de las personas cautivas se decidía en un segundo, se experimentaba con niños y adultos, no había comida, las enfermedades estaban a tope, las torturas eran inimaginables y el trato que recibían quienes estaban presos era inhumano.
El campo de concentración de Auschwitz estaba compuesto de tres partes, el principal; Auschwitz Birkenau, que era un campo de concentración y exterminio y Auschwitz Monowitz, donde se tenía a los prisioneros trabajando. Aunque no existen datos específicos, se calcula que cerca de un millón de personas murieron en Auschwitz.
Entre las paredes de Auschwitz, miles de personas perdieron la vida y hasta el último segundo hubo historias llenas de valentía, amor y fe, como lo fue San Maximiliano Kolbe, quien era un sacerdocio que fue encerrado y hasta el último momento desbordó amor, sacrificándose voluntariamente en lugar de un hombre con familia.
De igual manera, Santa Edith Stein, quien fue una destacada filósofa y religiosa, que dedicó su vida a investigar y conocer de Dios, y ni siquiera en sus últimos momentos, mientras esperaba la muerte en la cámara de gas, abandono su fe, convirtiéndose en santa y reconocida como la patrona de Europa.
En el marco de los 79 años de la liberación de Auschwitz, el campo más mortífero, lleno de horrores, inhumano y según sobrevivientes el infierno, Europa y el mundo aún viven en guerra; con los enfrentamientos entre Ucrania y Rusia y recientemente el conflicto que estalló en Medio Oriente entre Israel y Palestina.
Te puede interesar: En un año, casos de sarampión en Europa pasaron de 941 a 42,200
Facebook: Yo Influyo