Las tabacaleras están implementando novedosas campañas de marketing en línea aprovechando los adelantos tecnológicos en el metaverso, juegos publicitarios, podcasts, arte NFT y promociones de influencers con la intención de atraer nuevos consumidores jóvenes y aprovechando las lagunas, la poca regulación y vigilancia publicitaria en estos medios, revela un estudio Movimiento de Cumplimiento y Denuncia del Tabaco (TERM, por sus siglas en inglés) de Vital Strategies.
El reporte titulado La próxima dimensión del marketing del tabaco: El metaverso, las NFT, los advergames y más destaca que los espacios no regulados están dominados por audiencias más jóvenes, con algunas estimaciones que muestran que 51 por ciento de los participantes en el metaverso tienen 13 años o menos y son ellos los que reciben de forma constante materiales audiovisuales que promueven productos relacionados con el tabaco.
Nandita Murukutla, vicepresidenta de Política Global e Investigación en Vital Strategies, resaltó que “el uso del tabaco está disminuyendo a nivel mundial, y la industria tabacalera necesita desesperadamente enganchar a la próxima generación de usuarios para proteger sus ganancias a medida que los fumadores fallecen”.
Mencionó que el Movimiento de Cumplimiento y Denuncia del Tabaco aprecia que la industria se esfuerza para conquistar nuevos usuarios, por lo que aprovecha sus vastos presupuestos de marketing para colocar publicidad en cada rincón de internet, donde las regulaciones son más débiles.
Externó que es particularmente preocupante que los espacios que están abrumadoramente a las audiencias jóvenes, y aseguró que la exposición al marketing del tabaco es la razón principal por la que los jóvenes comienzan a fumar.
Añadió que está identificado que el tabaco se promociona en las redes sociales, se sabe menos sobre otros lugares digitales emergentes, y el informe que realizó Vital Strategies ofrece evidencia temprana sobre cómo esas plataformas son explotadas por las compañías tabacaleras en una gama de plataformas digitales.
De acuerdo al análisis, se destaca que entre las tecnologías digitales de nueva generación se están desarrollando diferentes modelos, entre ellos la cadena de bloques (un libro de contabilidad descentralizado que almacena el registro de propiedad de los activos digitales), la realidad virtual (un entorno tridimensional donde las personas pueden interactuar con entornos virtuales) y la tecnología de realidad aumentada (que integra información digital, como fotos o audio, en los entornos de la vida real de las personas se consideran del futuro. Estas tecnologías han dado lugar al desarrollo de fichas no fungibles (NFT), que son unidades de datos almacenadas en una cadena de bloques que pueden venderse e intercambiarse, y del metaverso, una realidad virtual aumentada que puede cambiar la forma en que vivimos el internet.
A pesar de que señala que hasta la fecha, las pruebas de cómo se han utilizado estas nuevas herramientas para comercializar el tabaco son escasas o nulas, destaca que existen investigaciones que demuestran por qué son tan codiciadas por los profesionales del marketing y cómo se están utilizando para promocionar el alcohol, otro producto no saludable que comparte un esquema de marketing similar con el tabaco.
Entre los hallazgos del informe se mencionan tácticas y herramientas de marketing utilizadas por las tabacaleras entre ellas que se comercializa usando una gama de tácticas en diferentes plataformas que incluye desarrollar videojuegos para anunciar productos (“juegos publicitarios”); utilizando marcas de música, deportes y aventura para promocionar indirectamente los productos de tabaco de una empresa (marketing comunitario y promociones de eventos); utilizando redes sociales para promover iniciativas de “responsabilidad social corporativa” para construir familiaridad con la marca, y vender productos a través de sitios web y aplicaciones de mensajería como WhatsApp que son más desafiantes de monitorear (venta en línea).
Nandita Murukutla consideró que con base en esos datos, los gobiernos deben intensificar las políticas inteligentes y su aplicación con urgencia para abordar los desafíos que esas herramientas digitales plantean para los esfuerzos de limitar el marketing del tabaco. “Necesitamos mantener nuestra presión y asegurarnos de que la tecnología no quede sin control”, subrayó.
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