Cualquier enfermedad grave, como en el caso del cáncer de próstata, puede prevenirse con diversos hábitos para cuidar el cuerpo como lo son una buena alimentación, practicar algún ejercicio o actividad física, dormir 8 horas, así como procurar tener momentos de relajación y distracción.
Desconocimiento, mitos, vergüenza, postergación o falta de atención médica son elementos que se anteponen a un diagnóstico temprano del cáncer de próstata, lo cual ha sido la causa de que cada año en México 7 000 hombres pierdan la vida, según reportes de la Secretaría de Salud.
Alrededor del mundo esta enfermedad es una de las principales que ataca al sector masculino, tan solo en Estados Unidos el cáncer de próstata es la segunda causa principal de muerte en los hombres, de acuerdo con estadísticas de la American Cancer Society.
La aparición y avance de esta enfermedad es casi imperceptible en las primeras etapas durante las cuales las células se malignizan y multiplican, lo que puede durar hasta 10 años sin que el paciente perciba síntomas que le indiquen que algo anda mal, por lo que los hombres que no se realizan revisiones rutinarias desarrollan tumores que son detectados en etapas avanzadas en las que es más difícil una recuperación y en el 70 por ciento de los casos diagnosticados en nuestro país, tienen un desenlace fatal.
En búsqueda de soluciones
Debido a lo letal de esta enfermedad, muchos esfuerzos científicos se han realizado para prevenir, detectar, atender y salvar la vida de quienes la padecen. Dos importantes avances al respecto se han dado recientemente, uno de ellos es una terapia desarrollada en el Instituto Weizmann de Ciencia en colaboración con Steba Biotech de Luxemburgo que consiste en la utilización de un láser y el fármaco Tookad® soluble, el cual recientemente fue aprobada en México por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
El Instituto Weizmann donde se desarrolló este tratamiento explica que este “se compone de una infusión intravenosa de Tookad® Soluble, inmediatamente seguida de la iluminación con un láser en el infrarrojo cercano a través de delgadas fibras ópticas que son insertadas en el tejido del cáncer prostático, y controladas por medio de ultrasonido.
“El medicamento permanece en el flujo sanguíneo hasta que es totalmente eliminado 3-4 horas después y no muestra toxicidad. La iluminación restringida al tejido enfermo activa el medicamento en circulación sólo localmente, resultando en una generación extensiva de moléculas tóxicas de corta vida. Estas moléculas altamente reactivas inicializan la rápida destrucción de los vasos sanguíneos del tumor, acompañado por la muerte necrótica del tumor completo y al mismo tiempo preservando estructuras cercanas y sus funciones”, lo que lo hace un tratamiento muy efectivo que evita muchos de los daños colaterales a los pacientes que otros procedimientos utilizados actualmente provocan.
La robótica facilita las operaciones
Otro de los importantes avances contra el cáncer de próstata son las operaciones que en la Unión Americana ya se están realizando exitosamente por médicos del Cleveland Clinic utilizando al Robot Single Port SP que permite insertar todos los instrumentos quirúrgicos necesarios para estas intervenciones a través de una pequeña incisión abdominal, gracias a lo cual la cirugía resulta mínimamente invasiva lo que beneficia la recuperación del paciente.
Gracias a este sistema los médicos controlan los instrumentos totalmente articulados y pueden observar amplia y nítidamente la zona en la que realizan la operación apoyados por las imágenes transmitidas por una cámara que puede insertarse gracias a la ayuda del Robot Single Port SP.
El mejor aliado, la prevención
Cualquier enfermedad grave, como en el caso del cáncer de próstata, puede prevenirse con diversos hábitos para cuidar el cuerpo como lo son una buena alimentación, practicar algún ejercicio o actividad física, dormir 8 horas, así como procurar tener momentos de relajación y distracción.
Además, es importante tener una revisión médica general por lo menos una vez al año para descartar cualquier enfermedad, y en su caso tratarla a tiempo antes de poner en riesgo la propia vida y reducir las posibilidades de sanar.
En el caso de los hombres es importante considerar si tienen alguno de estos síntomas, lo que puede indicar que haya presencia de hiperplasia de próstata (agrandamiento de la glándula prostática) o cáncer de próstata:
Dificultad para comenzar a orinar
Disminución del chorro de orina
Ganas frecuentes de orinar, inclusive por las noches
Sensación de tener la vejiga llena, inclusive después de haber orinado
Presencia de gotas de orina en la ropa interior
Impotencia o dificultad para mantener una erección
Dolor al eyacular o al orinar
Presencia de sangre en el semen
Ganas repentinas de orinar
Dolor en la región de los testículos o cerca del ano
De acuerdo con la Secretaría de Salud, en México se reportan entre 21 y 25 mil casos nuevos de cáncer de próstata. Se calcula que uno de cada 7 hombres morirá por este padecimiento. Diariamente se presentan 15 fallecimientos por esta enfermedad.
A pesar del silencio con el que avanza el cáncer de próstata es posible detectarlo y tratarlo a tiempo.
