La organización Educación con Rumbo (ECR) explicó que el reto para la Secretaría de Educación Pública (SEP) este 2023 consiste en coordinar esfuerzos para mejorar el aprendizaje de los estudiantes, dejando de lado la vieja y fallida fórmula de modificar el plan de estudios, programas, materiales educativos y libros de texto.
Patricia Ganem, coordinadora de investigación en ECR, indicó que “si observamos las acciones de la SEP como: otorgar becas, elaborar un nuevo marco curricular y diseñar nuevos libros de texto; esto no es lo que se necesita, ni lo que es pertinente para abatir el aprendizaje de los alumnos” y recalcó que se necesita hacer ver a padres de familia el impacto de las malas decisiones educativas en el aprendizaje de sus hijos.
Además, la institución afirmó que tratar de replicar la vieja fórmula de modificar el plan de estudios y programas es “apostarle a una política educativa que ha fracasado por pasadas administraciones” y recalcó que para que este ciclo escolar finalice se deben trazar metas a corto, mediano y largo plazo, siendo las de corto plazo las más importantes.
ECR también insistió que hay una permanente falta de información por parte de la SEP, para lograr establecer un diálogo con las distintas figuras en materia educativa, pues no han existido los mínimos procesos de relación o comunicación por los conductos o canales que establece la ley.
Respecto a los retos de corto plazo, el más importante es el de la transparencia, pues se debe informar de todo el proceso de elaboración del marco curricular antes de fin de año; mientras que, a mediano plazo, se tiene que trabajar en la actualización de los profesores, pues según una encuesta hecha por el organismo, hay conocimientos dispersos y diferentes por parte de los profesores, sobre el Plan 2022, pues no comprenden lo que se les pide.
“Señalan que es distinta a los que se han implementado anteriormente” y aunque quieren abordar contenidos regionales, no saben cómo hacerlo. ECR comentó que los profesores piensan que con el nuevo modelo, los estudiantes tendrán un aprendizaje disperso, lo que les preocupa bastante.
Y en los retos a largo plazo, es urgente que se pongan los reflectores en el rezago educativo, se recuperen los pequeños y jóvenes que han desertado y se trabaje en el sentir emocional de maestros y alumnos. Por ello, es urgente un sistema de información eficiente, que tenga información confiable de alumnos actuales y desertores.
Finalmente, ECR destacó que si esta administración quiere trascender, se debe “demostrar que los resultados son mejores a los de administraciones anteriores, deberán manifestar cómo lo hicieron y por supuesto, deberán dejar una línea de política educativa que sea permanente como lo exigen maestros y padres de familia”.
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