El presidente electo López Obrador aseguró que la decisión de cancelar el aeropuerto de Texcoco, está apegado al estado de derecho y representa el sentir de la sociedad.
Como un ejercicio “racional, democrático y eficaz” calificó Andrés Manuel López Obrador la consulta ciudadana donde ganó el proyecto de Santa Lucía para construir el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México.
Pocos minutos después de las 10 de la mañana de hoy, el presidente electo, López Obrador, flanqueado por José María Riobóo, responsable del proyecto del aeropuerto en Santa Lucía; Alfonso Romo, próximo jefe de la oficina de la Presidencia; y Javier Jiménez Espriú, futuro secretario de Comunicaciones y Transportes, confirmó lo que quizá para muchos ya no era sorpresa, la cancelación definitiva del nuevo aeropuerto en Texcoco, y la construcción de dos nuevas pistas en Santa Lucía, así como la modernización del actual aeropuerto de la Ciudad de México y reestructura del aeropuerto en Toluca.
Reiteró que a pesar de ya no realizarse el aeropuerto en Texcoco esta decisión se toma con respeto absoluto al estado de derecho, y que los intereses de las empresas e inversionistas están protegidos, pues hay un fondo del fideicomiso actual que respalda los compromisos en contratos e inversiones, además que “existe el respaldo de nuestra palabra, nuestra autoridad moral y política de atender cualquier reclamación de empresas o de inversionistas”.
Manifestó que es una buena noticia el que se haya optado por la construcción de dos pistas en Santa Lucía. “Estamos contentos porque se aplicó un ejercicio democrático, fue la gente la que decidió y tenemos que ir creando el hábito democrático, donde hay democracia no existe la corrupción, eso es lo más importante”. Además, que es un triunfo para el movimiento ambientalista, pues con esta decisión se salvará el lago Nabor Carrillo, y “no se van a ahuyentar los patos, las aves”.
Hizo hincapié en que actuaron de manera imparcial durante la consulta. Señaló que por tal motivo se reservó información que le llegó el fin de semana por parte del gobierno francés, donde “una empresa de prestigio” hizo un dictamen sobre la viabilidad de Santa Lucía, y “está demostrado que no existe ningún problema técnico (para que) puedan operar los dos aeropuertos (Santa Lucía y el actual de la Ciudad de México).
Finalizó señalando que “en términos económicos el gobierno federal se va a ahorrar con esta decisión inteligente y sabia de los ciudadanos alrededor de 100 mil millones de pesos”, además que se resolverá el problema de la saturación del actual aeropuerto.
Agradeció a los participantes en la consulta y dijo que se obedecerá “el mandato de los ciudadanos”.
Agregó que en tres años el proyecto de Santa Lucía y la adecuación del aeropuerto actual y el de Toluca habrán concluido.
