Lidiar con el estancamiento económico, la alta inseguridad, la incertidumbre política y un frágil sistema de salud, así como el alto rezago educativo son los principales retos que México tiene frente a sí en 2023 y que podrán superarse si se actúa con generosidad, sensatez, apostando a la unidad de los mexicanos y con visión de largo plazo, advierte la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
A través de su publicación oficial Señal, el organismo empresarial que preside José Medina Mora Icaza destaca algunos de los principales desafíos que en el año recién iniciado enfrenta el país, y entre los que sobresalen las elecciones que tendrán lugar en Coahuila y el Estado de México, las cuales consideró que podrían ser vistas como la antesala a la elección presidencial de 2024, por lo que consideró que “lo menos deseable es que estos procesos se vean marcados por la ilegalidad, manchados por no acatar las reglas electores o, peor aún, por cualquier tipo de injerencia del crimen organizado“.
Por otra parte, al recordar que este año se elegirán cuatro nuevos consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) y un nuevo presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la Coparmex hizo un llamado para que “estos nombramientos se den con estricto apego a la ley pero, sobre todo, que se privilegie la idoneidad de los perfiles, su experiencia, solvencia moral y autonomía para la toma de decisiones”.
Resaltó que una señal poderosa que debe enviar México al exterior es que damos pasos al frente en materia democrática; que tenemos una sociedad que puede pensar distinto y que se respeta en el disenso. “México pierde si se viola la ley, si se manipulan las elecciones o si se abre la puerta a la injerencia política de la delincuencia. El voto libre y razonado debe garantizarse”.
En torno al tema económico, el sindicato patronal indicó que a pesar de que el año pasado mejoraron los niveles de actividad económica, aún hay 14 estados del país que aún se encuentran por debajo de la actividad económica previos a la pandemia.
Asimismo, señala que existe un contexto de alta inflación que experimentamos a lo largo del año, que se explica por las distorsiones ocasionadas a raíz del COVID-19 y la guerra entre Rusia y Ucrania que ha presionado al alza el precio de los energéticos y los alimentos, situación en la que las más afectadas han sido las familias.
En este sentido, destacó que los productos cuyos costos más se han incrementado son las mercancías alimenticias y agropecuarios, los cuales presentaron una inflación de 12.6 por ciento en noviembre y acumularon 13 meses consecutivos con inflación de doble dígito. Esta situación ha implicado un aumento acumulado en el año de la tasa de interés de referencia por parte de Banco de México (Banxico) de 500 puntos base pasando de 5.50 en enero a 10.50 por ciento en diciembre. Aseguró que “a pesar de que la inflación ha empezado a ceder, se espera que la reducción sea lenta y al cierre de 2023 se ubique en 5 por ciento.
Coparmex indica que al cierre de 2022 mejoraron las perspectivas de crecimiento económico al estimarse un crecimiento de alrededor del tres por ciento, impulsado principalmente por el buen desempeño de nuestras exportaciones y el dinamismo de la economía estadounidense. Sin embargo, advierte que para 2023 el consenso de mercado espera un crecimiento de alrededor de uno por ciento, ante una desaceleración de la actividad económica en Estados Unidos y por un aumento generalizado de las tasas de interés. “De concretarse este escenario, el sexenio actual tendría un crecimiento anual promedio de 0.2 por ciento. Es decir, un sexenio de estancamiento en cuanto a crecimiento económico”.
A fin de potencializar el crecimiento económico, la Coparmex asegura que la reestructura de las cadenas de suministro que están ocurriendo a nivel global ofrecen a México una ventana única para atraer inversión y aprovechar las ventajas comparativas que nos otorga el T-MEC. Para ello, el país debe contar con las condiciones necesarias para brindar confianza, por lo que “se requiere mandar mensajes contundentes de certidumbre y respeto al Estado de Derecho. Entre ellos, la pronta resolución de las consultas en materia energética y permitir la competencia en este sector”.
En otro aspecto, el organismo patronal dijo que se han llevado a cabo varios esfuerzos por mejorar las condiciones del empleo formal, como el incremento al salario mínimo, el incremento a las contribuciones patronales a las pensiones y las vacaciones dignas. Sin embargo, advirtió que “esto tiene que ser acompañado de una política pública de incentivos fiscales que promuevan la generación de empleo formal“.
Con respecto a rubros sociales en los que existen importantes retos, la Coparmex insistió que en materia de seguridad es imprescindible que haya una reformulación de la política y la estrategia y que no debe suplantarse ni abandonarse el desarrollo de las policías estatales y municipales. Las instituciones civiles de la policía a nivel local deben robustecerse, pues son junto con las Fiscalías, quienes están facultadas para interactuar con la población civil, prevenir los delitos, la violencia y llevar a cabo investigaciones y procedimientos legales de los delitos del fuero común que más impactan a los ciudadanos.
En materia educativa, señaló, más que el impulso de nuevos planes y programas, la clave está en revertir el impacto de la pandemia en materia de abandono escolar y la pérdida de aprendizaje. La inversión en la capacitación docente y en la infraestructura educativa es clave.
Y finalmente, en el tema de salud, destacó que es momento de dejar de lado la improvisación, pues la vida y salud de las personas deben estar al centro. Dotar de presupuesto suficiente al sector es clave sin dejar de lado el énfasis en la prevención.
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