El cardenal Rivera ya había sido atacado anteriormente en la Catedral metropolitana, por ello contaba con un equipo de seguridad.
El pasado 21 de octubre alrededor de las 15 horas, la casa del arzobispo emérito de la Ciudad de México, Norberto Rivera Carrera fue baleada por dos hombres, uno de ellos con vestimenta militar.
De acuerdo con información de la policía capitalina, dos hombres llegaron al domicilio del cardenal emérito, en la colonia Florida, con el pretexto de entregar un paquete para el arzobispo. Dispararon contra uno de los elementos de seguridad en tres ocasiones, posteriormente, luego de un intenso forcejeo, fueron repelidos por los demás custodios y finalmente huyeron en dos camionetas.
Reportes de la policía señalaron que el escolta que recibió los impactos de bala se llamaba José Javier Hernández Nava. Tenía 41 años y desde hace 20 años formaba parte de la corporación de la Policía Bancaria e Industrial. Lamentablemente, debido a las heridas, falleció al llegar al nosocomio adonde fuera trasladado.
El secretario de seguridad pública capitalina, Raymundo Collins, se trasladó al lugar de los hechos, donde tuvo oportunidad de platicar con el cardenal Rivera Carrera, para posteriormente señalar que el arzobispo en ningún momento estuvo en riesgo.
El arzobispo emérito dijo desconocer tanto la identidad como los motivos de los agresores para intentar ingresar en su domicilio y se manifestó consternado por la muerte de una persona responsable de su protección.
Esto lo dio a conocer el sacerdote Hugo Valdemar, quien fuera vocero del cardenal, y que se encontraba con él al momento de los disparos. Y aunque de principio Valdemar niega que se trate de un atentado en contra del cardenal, recordó que en la Catedral Metropolitana, Rivera Carrera sufrió ataques que orillaron a que se implementara un grupo de seguridad y custodia para su persona.
En un comunicado de prensa, Marilú Esponda, directora de comunicación social del Arzobispado de México dio a conocer que el cardenal Carlos Aguiar Retes lamentaba profundamente el fallecimiento de Javier Hernández Nava. El cardenal se encuentra en Roma participando en el Sínodo de los Obispos,.
Por su parte la Conferencia del Episcopado Mexicano en un comunicado manifestó su “cercanía, solidaridad y apoyo” al cardenal Norberto Rivera, reconociendo los “trabajos que de manera inmediata han realizado y (esperando) que continúen hasta esclarecer los hechos como corresponde”.
Ataques a sacerdotes en México
México sigue siendo un país donde ejercer el sacerdocio implica un riesgo. El pasado 17 de octubre fue reportado como desaparecido el padre Enrique Madrid Hernández, quien afortunadamente a dos días de que fuera privado de la libertad, fue liberado por sus captores.
Sin embargo no todos los casos son así, apenas el pasado 12 de octubre fue hallado el cuerpo sin vida del sacerdote Ícmar Arturo Orta en Baja California, sumando con ello 26 sacerdotes asesinados en lo que va del presente sexenio.
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