México; Princesa Carlota, XLI

Del ensueño a la locura; Carlota una princesa infortunada – Cap XLI Defensa heroica y actos de honor

El ejército republicano llegaba muy bien armado y artillado con dieciocho mil hombres y pronto llegaría a veinticinco mil. El estado mayor del emperador analizó la situación y Miguel propuso hacer salidas relampagueantes para intentar debilitar al enemigo, pero Márquez se opuso, así que cayeron en una etapa de inacción, que para lo único que sirvió fue para que el enemigo organizara mejor todas las fuerzas de que disponía.



Mientras tanto, Miguel ordenó construir una fortificación pasajera en el cerro de las campanas. El emperador dormía en el suelo como todos los demás, envuelto en un sarape nacional de colores jaspeados. El famoso convento de la Cruz estaba muy mal organizado por Márquez. Cuando los liberales inician el ataque, Miramón tuvo que moverse de un lugar a otro como una ráfaga, llenando a sus hombres de fuerza y entusiasmo, según lo reconoce el mismo general republicano Sóstenes Rocha.

Las brillantes acciones de Miguel hicieron que se retirara momentáneamente el ejército enemigo, y el mismo emperador felicitó al general Miramón. Estas primeras acciones generaron optimismo en las tropas imperiales y Miguel propuso que salieran para sorprender al enemigo; y cuando todo estaba ya listo para una nueva incursión en la que Miguel confiaba ampliamente, Márquez y López, del que ya hablaremos posteriormente, se encargaron de convencer al emperador de que eso sería muy peligroso. El emperador se dejó influenciar, y cuando Miguel pasaba revista a sus tropas para la salida, recibió la orden de cancelar la operación.

El disgusto de Miguel era desbordante. Ante tanta desidia y decisiones militarmente equivocadas Miguel decidió que ya no propondría nada y se dedicaría a seguir las órdenes que le dieran. Pero permanecer inactivo estaba contra la naturaleza misma de Miguel, así que pronto lo vemos salirse con la suya y lanzar un ataque sorpresa contra el enemigo, que se ve con grandes bajas. No sabemos cuáles fueron las maniobras de Márquez, pero el hecho es que fue designado por Maximiliano para ir a la capital por refuerzos, con los que nunca regresaría.

Ahora la ciudad contaba con menos hombres, pero con la gran ventaja de que por fin Miguel se quedaba a cargo del ejército defensor de la ciudad. Los republicanos lanzaron una gran ofensiva; y cuando parecía que estaban a punto de tomar la ciudad, una gran descarga de artillería de los hombres de Ramírez de Arellano sembraron tal pánico entre los atacantes, que acabaron huyendo con la llegada del general Miramón que reforzó las acciones y dejó en el enemigo más de mil quinientas bajas.

Miguel se presentó ante el emperador con gran entusiasmo y gritó con sus tropas “¡Viva su Majestad el emperador!”, que le correspondió con un sincero abrazo. Sin embargo, la realidad no era buena, cada vez escaseaban más los alimentos y las municiones, mientras las tropas asaltantes gozaban de todo el reabastecimiento de pertrechos y alimentos. Se puede decir que las tropas defensoras ya pasaban hambres y miserias, pero daban pruebas de admirable abnegación. Se organizó con lo poco que se tenía una fiesta militar en la Cruz. El emperador condecoró a sus oficiales, al final de la ceremonia Miguel rompió con todo el protocolo, tomó una medalla y se dirigió al emperador, y dijo en tono solemne y emocionado:

“Vuestra Majestad ha condecorado a sus oficiales y soldados como un reconocimiento de su valor, fidelidad y adhesión. A nombre del ejército de Vuestra Majestad, me tomo la libertad de dar esta muestra de valor y de honor al más valeroso de todos, que siempre ha estado a nuestro lado en todos los peligros y fatigas, dándonos el más augusto y brillante ejemplo, distinción que merece Vuestra Majestad, antes que ningún hombre”, y luego le prendió al pecho una medalla. Sorprendido, Maximiliano abrazó a Miguel, y desde ese día lució esa condecoración como la más valiosa y más preciada de las que tenía.

@yoinfluyo

redaccion@yoinfluyo.com

* Las opiniones expresadas en esta columna son de exclusiva responsabilidad del autor y no constituyen de manera alguna la posición oficial de yoinfluyo.com


 

*Las opiniones vertidas en este artículo son responsabilidad del autor

Compartir

Lo más visto

También te puede interesar

No hemos podido validar su suscripción.
Se ha realizado su suscripción.

Newsletter

Suscríbase a nuestra newsletter para recibir nuestras novedades.