Cercano el día del padre y en dicha fecha, a un buen número de personas que publican sus opiniones les parece más que oportuno aprovechar el momento para dar mayor y única importancia a los malos padres.
Pasan los “día del padre” cada junio, y muestran una gran diferencia con los “día de la madre” en mayo. Algo muy claro, que como dice el chiste, en el lenguaje del Dr. Simi: “Lo mismo, pero más barato”. Hay sin duda diversas razones para que nuestro mundo se esfuerce más en festejar a las madres, en mucho porque los varones se empeñan particularmente en honrar a las mujeres madres de sus familias y al concepto materno en general. Entendible.
Pero hay una diferencia que en particular podemos observar. En los “día de la madre”, los comentarios en medios y ahora redes sociales, son de alabanza, de reconocimiento, de amor. No se ven señalamientos o quejas contra las malas madres, que las hay. Pero cercano el día del padre y en dicha fecha, a un buen número de personas que publican sus opiniones les parece más que oportuno aprovechar el momento para dar mayor, mucha mayor y única importancia a los malos padres que a los buenos y responsables.
Me refiero a quienes aprovechan para reclamar a los padres irresponsablemente ausentes, y en especial a los que no pagan las pensiones alimenticias. De acuerdo que los hay, pero los padres irresponsables son solamente una muy pequeña proporción frente a los que sí son buenos y responsables. No faltan quienes, en particular mujeres, aprovechan el día del padre para alabar a las madres “todo terreno”, que hacen las veces de madre y padre, sin tomar en cuenta las razones para que sean cabeza de familias uniparentales, que pueden ser justas o injustas.
Veo en esas personas que se concretan en “celebrar” el día del padre para acusar, señalar o reclamar a los malos padres, pero sin hacer mención y mucho menos reconocimiento a los buenos padres. Los memes sobre las demandas de pensión alimenticia no se equilibran, para nada, con el reconocimiento a la abrumadora mayoría de los buenos padres de familia. Basta ver lo publicado en Facebook, por ejemplo.
La verdad es que los padres responsables, con todas sus debilidades humanas y errores, son casi todos. El papel del padre como proveedor familiar es cumplido, también en general, a veces a muy altos costos personales, fatiga, malos tratos, enfermedades profesionales (muchas no reconocidas), largas jornadas fuera de casa para ir y regresar de un trabajo, más la jornada laboral misma.
Mucho se puede decir, y en efecto se publica en medios y redes, sobre las acciones del varón que ama a su familia y textualmente da su vida por ella. Y por esta razón, me parece inaceptable que, en vez de aprovechar para reconocerlo, mentes amargadas (así las veo) se concentren en fustigar a los malos padres, olvidando a esa mayoría abrumadora de buenos padres de familia. Ojalá reflexionen, y reconozcan a los buenos padres tal como reconocen a las buenas madres, dejando en su cabeza los ataques a los padres irresponsables, esos de la pensión alimenticia no cumplida, no viene al caso. La amargura, el rencor y el odio son pésimos consejeros. Sí: los buenos son los más.
Te puede interesar: Presunción de culpabilidad entre presidentes: Calderón y López Obrador
* Las opiniones expresadas en esta columna son de exclusiva responsabilidad del autor y no constituyen de manera alguna la posición oficial de yoinfluyo.com