El Centro Estatal Manejo del Fuego de la Ciudad de México refiere que el 100 por ciento de los incendios forestales tienen un origen antropogénico, es decir, son causados por los seres humanos.
La Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) emitió una serie de recomendaciones para que la ciudadanía pueda evitar incendios forestales, pues entre las consecuencias de los incendios está la afectación del aire, la desaparición de especies nativas y el aumento de niveles de dióxido de carbono que provocan el efecto invernadero.
“El Centro Estatal Manejo del Fuego de la Ciudad de México refiere que el 100 por ciento de los incendios forestales tienen un origen antropogénico, es decir, son causados por los seres humanos, por lo que es de suma importancia evitar acciones que deriven en incendios”, comentó la Sedema.
Estas son las acciones que se deben evitar:
● Fogatas.
● Quemas agrícolas.
● Quemas por pastoreo.
● Tirar basura o arrojar pedazos de vidrio o espejos en los bosques.
● Lanzar colillas de cigarro a los bosques.
“Los incendios forestales dañan a la fauna y flora del suelo de conservación y Áreas Naturales Protegidas y afectan la calidad del aire que todos respiran”, recalcó la Secretaría y subrayó que los incendios también erosionan el suelo, lo que propicia inundaciones y corrimientos de tierra.
Además, Sedema compartió que brigadistas de las Direcciones Generales de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (DGCORENADR) y del Sistema de Áreas Naturales Protegidas y Áreas de Valor Ambiental (DGSANPAVA) llevan a cabo labores de monitoreo, podas, deshierbes y capacitaciones para mejorar el manejo de combustibles.
Para esas labores, hay 13 torres de detección y cuatro regiones conocidas como Centros de Innovación e Integración Comunitaria (CIIC) y hay 126 brigadas que trabajan los 365 días del año.
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