Más de 65 millones de personas en el mundo sufrieron desplazamientos forzados durante 2016, de estas 10 millones tienen alguna discapacidad, por lo que los riesgos que atraviesan son aún mayores, según datos de la agencia de la ONU para los refugiados, Acnur.
De acuerdo a Xavier Devictor, asesor para la Fragilidad, Conflicto y Violencia Grupo del Banco Mundial, “si todas estas personas (65 millones) vivieran en un país, este tendría una población superior a la del Reino Unido”. Además, observa que “los desplazados a menudo son personas pobres en condiciones de gran vulnerabilidad”, por lo que quienes además sufren alguna discapacidad son aún más frágiles y corren mayores riesgos para sobrevivir.
El Comité de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad realiza su sesión número 18, durante la cual revisará las medidas tomadas por varios países para implementar las disposiciones de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
La Acnur está tratando de incluir de manera significativa las voces de las personas con discapacidad en el desarrollo del Pacto Global sobre Refugiados que será presentado a la Asamblea General de la ONU en el 2018.
“La Declaración de Nueva York para Refugiados y Migrantes, adoptada por la Asamblea General de la ONU en el 2016, proporcionó una base sólida para que Acnur amplíe su asociación con los interesados en fortalecer los sistemas de servicio en los países que han recibido refugiados para beneficio de las personas con discapacidad en situación de desplazamiento”, indicó.
De acuerdo con Acnur, tales esfuerzos incluyen fortalecer las redes de apoyo basadas en la comunidad y abordar la exclusión y la discriminación experimentadas por las personas con discapacidad.
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