California fue el principal exportador de desechos plásticos a México y Ecuador. Estos residuos ingresaron al país, principalmente por la vía terrestre en camiones.
Estados Unidos exportó 44 mil 173 toneladas de desechos plásticos a 15 países latinoamericanos, entre enero y agosto de 2020, lo que significó el envío diario de por lo menos 35 contenedores a la región con estos residuos.
De acuerdo con el estudio “Cuando la basura plástica nos alcanzó y nos rebasó”, realizada por organizaciones ambientales de México, Ecuador, Argentina, Chile, con el apoyo de la Alianza Global para Alternativas para la Incineración (GAIA, por sus siglas en inglés), que promueve estrategias de basura cero.
Según GAIA, América Latina y el Caribe se están convirtiendo a pasos acelerados en un nuevo destino de la basura plástica mundial, en especial procedente de Estados Unidos, el mayor exportador de estos desechos.
De acuerdo con la información recopilada, México, El Salvador y Ecuador son los principales destinos en América Latina de estos desechos plásticos. Solo entre enero y agosto de 2020, llegaron 32 mil 650 toneladas a México; 4 mil 054 toneladas a El Salvador y 3 mil 665 toneladas a Ecuador.
Según el estudio, California fue el principal exportador de desechos plásticos a México y Ecuador. Estos desechos ingresaron al país, principalmente por la vía terrestre en camiones. A Ecuador a través de sus puertos. California lidera las exportaciones de residuos plásticos a países con malas gestiones de residuos.
GAIA no es la única organización que ha observado con preocupación el aumento de los flujos de desechos plásticos hacia la región. En agosto de 2020, la Interpol publicó un informe que menciona el crecimiento del sector de reciclaje en América Latina, lo que podría abrir nuevos mercados para los residuos plásticos, sobre todo de Estados Unidos.
Además de que existen crecientes inversiones en la región para implantar nuevas instalaciones de reciclaje en México, Argentina y otros países de América Central, del Sur y en el Caribe.
El Convenio de Basilea es un acuerdo internacional sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y otros desechos. En mayo de 2019, los países parte adoptaron la enmienda de plásticos ante la creciente contaminación mundial por basura plástica y micro plástica. No es una prohibición a la importación, pero sí requiere a los exportadores el consentimiento de los países receptores. La enmienda entró en vigor en enero de 2021.
La GAIA y sus organizaciones aliadas en los países de estudio exigen a los gobiernos el cumplimiento del Convenio de Basilea y mayor transparencia sobre el tipo de desechos plásticos que están llegando a la región, para evitar que los países receptores se conviertan en nuevos vertedores de la basura mundial.
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