Familias, estudiantes y docentes deben exigir condiciones de seguridad que les generen tranquilidad para la reapertura, así como organizar el regreso a clases presenciales de forma escalonada.
La organización Mexicanos Primero afirmó que para poder garantizar un regreso a clases seguro este 30 de agosto, es necesario que las autoridades educativas elaboren un protocolo sólido que se aplique en cada escuela del país, sustituir a docentes vulnerables, hacer diagnósticos y revisar situaciones particulares, pues no todas podrán hacerlo al mismo tiempo.
David Calderón, presidente nacional de esta organización, dijo que la lista compartida por la Secretaría de Educación Pública (SEP) no es un protocolo de regreso a clases.
“La guía de la SEP publicada en su actualización más reciente en junio todavía tiene la carta de corresponsabilidad y que todavía indica el uso de cubrebocas de dos capas no es un protocolo. Un protocolo indica con precisión, con una lista de cotejo, qué condiciones se deben observar, quién es el responsable, con qué periodicidad se va estar atendiendo”, señaló.
En videoconferencia, Calderón mencionó que en el caso de los maestros, estos tienen que recibir una formación para tener claro cuáles son los aprendizajes fundamentales que se quieren recuperar y la manera de atender la salud emocional de los estudiantes. Además, deben recibir todos los elementos que requieran para brindar atención mixta.
“Es decepcionante, por decir lo menos, que de momento la respuesta sea una mezcla entre las sesiones del profesor y otra temporada más de Aprende en Casa por televisión cuando ya se demostró que los programas de televisión no alcanzan resultados suficientes, ni logran el interés”, acentuó.
El presidente de Mexicanos Primero enfatizó que las autoridades educativas y el gobierno federal deben dejar de dar declaraciones muy vagas respecto a la rehabilitación de las escuelas, ya que deben transparentar los recursos que se están utilizando y cuál es su origen.
Deterioro emocional y pérdida de aprendizaje
Laura Ramírez, directora de activación de agentes, indicó que desde hace 17 meses que las escuelas cerraron por la pandemia, lo cual ha obstaculizado el derecho de niñas y niños para aprender. Mencionó que el estudio Equidad y Regreso de Mexicanos Primero dio a conocer la evidencia de campo sobre el deterioro socioemocional y la pérdida de los aprendizajes.
Con base en las principales cifras del sistema educativo, se estima que 4.5 millones de estudiantes están en riesgo de ver interrumpidos sus estudios. Una gran proporción de los niños manifestaron sentirse deprimidos, lo cual va a traer consecuencias negativas para su desarrollo físico, emocional, escolar y laboral. “De ahí la importancia de volver para garantizar el derecho a la educación, al libre desarrollo de la personalidad, al juego, a la vida libre de violencia, a la salud física socioemocional”, agregó Laura Ramírez.
Por último, David Calderón señaló que las condiciones para volver a las aulas deben exigirse y no esperar pasivamente; que las comunidades que puedan abrir, que lo hagan; no negar oportunidades a quienes más lo necesita. Los planteles que aún no puedan hacerlo, que reciban apoyo real que demanda la justicia con equidad.
“Es urgente un diálogo verdadero y continuo con los estados y a su vez, en cada estado se debe escuchar a cada comunidad escolar para conocer las condiciones en las que será posible este regreso, pues hay planteles que pueden abrir y otros no”, concluyó
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