Expresaron su preocupación por el nivel de violencia sin precedentes contra las mujeres, incluidas periodistas.
Un grupo de expertos en derechos humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Organización de los Estados Americanos (OEA) pidió a las autoridades mexicanas a que se investiguen los asesinatos y las violaciones de derechos humanos que se presentaron previo a la votación del domingo, así como durante el mismo día de las elecciones.
Con más de 20 mil escaños en juego, las elecciones del domingo fueron las mayores elecciones de la historia de México: se votó por 500 miembros de la Cámara Baja del Congreso y 15 gobernadores de estados, así como por miles de funcionarios locales.
“Hacemos un llamado a las autoridades mexicanas para que pongan fin a la intensa polarización de la vida pública y que garanticen que las futuras elecciones se celebren de forma pacífica. Esta es la púnica manera de que México avance democráticamente”, indicaron a través de un comunicado.
A pesar de la violencia a lo largo del periodo electoral, reconocieron los esfuerzos del gobierno para contrarrestar la violencia, incluyendo la reciente implementación de una estrategia para frenar la violencia política y las amenazas contra los candidatos, y los esfuerzos genuinos para asegurar que ningún votante sea discriminado.
Mencionaron que tras una mortífera campaña electoral que desde el mes de septiembre se han producido al menos 250 asesinatos políticos durante el periodo previo a la campaña y la propia campaña. Entre las víctimas figuran al menos 89 políticos y 35 candidatos, así como sus familiares, periodistas y funcionarios no políticos.
Según el comunicado, hubo al menos otros 782 ataques por motivos políticos, que van desde amenazas de muerte hasta intentos de asesinato contra políticos. Muchos candidatos abandonaron la campaña alegando que temían por su vida.
Los expertos expresaron su preocupación ante la persistencia de patrones discriminatorios operados por los actores políticos, especialmente contra las mujeres y los grupos tradicionalmente marginados, como los pueblos indígenas.
Así como la preocupación por el nivel de violencia sin precedentes contra las mujeres, incluidas periodistas. “Las agresiones contra las mujeres, incluida la violencia sexual, representan más de un tercio de todas las agresiones denunciadas durante la campaña”, señalaron.
Recordaron que el derecho a la vida es una garantía fundamental y que los candidatos deben poder hacer sus campaña sin estos temores.
Los especialistas subrayaron el importante papel que desempeñan las instituciones electorales independientes, ya que en cualquier elección libre y justa “son vitales para prevenir el fraude electoral y, por tanto, deben ser protegidas de cualquier presión indebida, intimidación o amenaza”.
Mencionaron que esperan no volver a ver los asombrosos niveles de violencia alcanzados en las elecciones de 2018 y, sin embargo, “este año ha sido, si cabe, aún peor”, lamentaron los expertos.
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