Toda vida humana importa

Toda vida humana importa…



Desde hace 11 años se han cometido más de 194 mil abortos en la Ciudad de México, y por eso el 28 de abril más de 22 mil personas demostramos, de forma pacífica en las calles, un absoluto rechazo a esta ley, una política pública fracasada, que impulsa y avala la muerte de los bebés dentro del vientre de su madre, y que no ha alcanzado sus objetivos de origen: bajar la tasa de abortos clandestinos y reducir la muerte de mujeres por esta práctica, al contrario, hay un alza en su incidencia e inclusive hay mujeres que han abortado más de tres veces.

 

Según cifras oficiales, de 2007 a la fecha se han cometido casi 200 mil abortos en la capital del país en hospitales públicos, de los cuales el 40% ha sido en mujeres con un nivel de estudios de bachillerato, el 46% tiene de 18 a 24 años de edad y a casi el 25% se le ha tenido que hacer esta práctica por aspiración, pero estos datos se quedan cortos, porque no incluyen los abortos en clínicas clandestinas ni privadas, que suman cifras escalofriantes e indignantes.

 

Uno de los argumentos que supuestamente avala el derecho de las mujeres a abortar es que son libres de decidir sobre su cuerpo, pero la mala interpretación de este derecho, hace que el feminismo radical impulse este “falso derecho” para influir en otras mujeres para que estén a favor del aborto y promoverlo, lo que no entienden es que a vida de todo ser humano inicia desde la concepción siendo un ser único, que se mueve, desarrolla y siente, y nadie tiene derecho a matarlo.

 

Otro argumento inválido, que recientemente dio la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), es que aquella mujer que haya quedado embarazada tras ser violada y pida abortar, se le realice esa intervención con calidad de urgente para evitar que las “consecuencias psicológicas se sigan desplegando con el tiempo”, sin contemplar que se le victimiza doblemente con el aborto y que los daños psicológicos que éste le produce pueden ser permanentes, si no se le da la atención a la mujer, ya que ella jamás olvidará que es madre de un hijo muerto.

 

Con la Marcha por la Vida, por séptima vez consecutiva, se demostró se demostró que la mayoría de los habitantes de la Ciudad de México rechazamos las ideas tiránicas que, ante un embarazo no planeado, un bebé que viene con alguna malformación o que pone en riesgo la vida de su madre, sólo ofrecen soluciones de muerte y no de vida.

 

En la marcha todos coincidimos en que, si queremos tener un México progresista, continuar cometiendo el delito del aborto sólo nos llevará a un acelerado retroceso progresivo, el cual ya vivimos desde 2007, con su legalización.

 

Exigimos el respeto del derecho de vida de todos y todas en cualquier etapa y circunstancia desde la concepción hasta la muerte natural sin discriminación, pues para ser progresistas toda vida humana importa.

 

@yoinfluyo

redaccion@yoinfluyo.com

 

* Las opiniones expresadas en esta columna son de exclusiva responsabilidad del autor y no constituyen de manera alguna la posición oficial de yoinfluyo.com

Compartir

Lo más visto

También te puede interesar

No hemos podido validar su suscripción.
Se ha realizado su suscripción.

Newsletter

Suscríbase a nuestra newsletter para recibir nuestras novedades.